Que hasta que la filosofía que sustenta la existencia
de una raza superior y otra inferior
sea final y permanentemente
desacreditada y abandonada,
por todos lados estará la guerra,
yo digo: guerra.
Y hasta que ya no haya
una primera clase y una segunda clase
de ciudadanos de cualquier nación.
Hasta que el color de la piel de un hombre
no tenga mayor importancia que el color de sus ojos,
yo tengo que decir: guerra.
Y hasta que los derechos humanos básicos
sean igualmente garantizados para todos,
sin importar la raza,
esto es una guerra.
Que hasta ese día,
el sueño de una paz duradera,
la ciudadanía mundial,
y la ley de la moralidad internacional,
seguirán siendo una fugaz ilusión que perseguir,
pero que nunca alcanzaremos.
Por todos lados hay guerra,
yo digo: guerra.
Guerra en el este,
guerra en el oeste,
guerra arriba en el norte,
guerra abajo en el sur.
Y hasta que los innobles e infelices regímenes
que mantienen a nuestros hermanos
en Angola, Mozambique, Sudáfrica,
en una servidumbre sub humana hayan sido derribados,
totalmente destruidos.
Por todos lados hay guerra,
yo digo: guerra.
Guerra en el este,
guerra en el oeste,
guerra arriba en el norte,
guerra abajo en el sur,
guerra, guerra, rumores de guerra.
Y hasta ese día,
el continente africano no conocerá la paz,
nosotros los africanos, lucharemos,
lo creemos necesario,
y sabemos que venceremos porque tenemos confianza
en la victoria del bien sobre el mal,
del bien sobre el mal, del bien sobre el mal,
por todos lados hay... guerra.
Bob Marley - Guerra (Letra basada en el
discurso de
Haile Selassie ante la ONU en 1963)